Londres, 19 dic (Prensa Latina) El primer ministro británico, Boris Johnson, recalcó hoy al Parlamento por boca de la reina Isabel II que su prioridad en la nueva legislatura será concretar el Brexit el 31 de enero próximo.
La prioridad de mi gobierno es cumplir con la retirada del Reino Unido de la Unión Europea (UE) el 31 de enero, anunció la monarca al inicio del discurso con el cual quedó formalizado el Parlamento surgido de las elecciones generales celebrados la semana pasada.
El documento leído por la Reina en el Palacio de Westminster incluye la agenda que propone el Ejecutivo a los legisladores para el año próximo.
Respecto al Brexit, Johnson confirmó que presentará de inmediato a la Cámara de los Comunes el acuerdo que negoció con la UE, y una vez consumado el divorcio, buscará establecer una nueva relación con el bloque europeo, a partir de la rúbrica de un tratado de libre comercio.
Se prevé que el controvertido tratado de retirada, que fue rechazado varias veces en la anterior legislatura, sea aprobado sin mayores dificultades, en virtud de la mayoría absoluta de 80 diputados que logró el gobernante Partido Conservador en las recientes elecciones.
En el plano doméstico, el gobierno adelantó que cumplirá la promesa de campaña de apuntalar el deteriorado sistema de salud pública con una inversión de casi 34 mil millones de libras esterlinas anuales a partir del 2023.
Por primera vez, el acuerdo multianual de fondos para el Sistema Nacional de Salud (NHS) acordado a principios de este año se convertirá en ley, asegura el texto.
También abogó por enmendar el código penal para garantizar penas más severas para los convictos por delitos violentos, y que los condenados por terrorismo cumplan la totalidad de las sentencias.
Según dejó claro en el llamado Discurso de la Reina, Johnson también introducirá un sistema de puntos para regular la inmigración, y priorizar a los trabajadores calificados que buscan asentarse en el Reino Unido.
A tono con la celebración de la cumbre sobre el clima el año próximo en Glasgow, el gobierno Tory aseguró que seguirá dando pasos para cumplir la meta de cero emisiones de gases causantes del llamado efecto invernadero para 2050.
La presentación de la agenda gubernamental, aplaudida a rabiar por los conservadores, no sentó muy bien dentro de las ahora minoritarias filas opositoras.
No hay nada nuevo en este Discurso de la Reina para nuestro sistema de salud, los servicios públicos o para la gente que está luchando en estas Navidades, aseguró el número dos del Partido Laborista, John McDonnell.
En opinión de McDonnell, cuyo partido sufrió una derrota electoral aplastante, al perder 59 escaños y quedar con apenas 203 diputados, el texto evidenció que será un gobierno para las minorías.
Para los Liberales Demócratas, que obtuvieron 11 asientos, se trata de una agenda desastrosa que impondrá un Brexit duro, socavará los servicios públicos y de destruirá las oportunidades para las comunidades.
De su lado, el secretario general de sindicato Unison, Dave Prentis, comparó a los conservadores Ebenezer Scrooge, el avaro personaje central de la novela de Charles Dickens Cuento de Navidad.
Después de muchos años haciendo de Scrooge, ahora quieren presentarse como Papá Noel y los salvadores del NHS, afirmó Prentis, en alusión a la política de austeridad y recortes impuesta por los Tories en la última década.